En una emocionante definición por penales, la selección argentina femenina se adjudicó el tercer puesto de la Copa América Femenina disputada en Ecuador, superando a Uruguay por 5-4 tras igualar 2-2 en el tiempo reglamentario.
Un partido de alternativas cambiantes
El encuentro, disputado en el estadio Rodrigo Paz Delgado de Quito, mostró la paridad entre dos selecciones que han evidenciado el crecimiento del fútbol femenino en Sudamérica. Argentina, que había caído en semifinales ante una potente selección brasileña, tomó la iniciativa con un gol de Aldana Cometti a los 24 minutos.
La remontada charrúa y la reacción albiceleste
Uruguay, que venía de mostrar un gran nivel en el torneo pese a su derrota en semifinales, logró dar vuelta el marcador con tantos de Esperanza Pizarro y Juliana Viera. Sin embargo, la Albiceleste no se rindió y consiguió la igualdad mediante un penal convertido por Florencia Bonsegundo a los 83 minutos.
Una definición para la historia
En la tanda de penales, la figura de la portera argentina Solana Pereyra resultó fundamental al detener el tiro de Stephnie Lacoste. El tanto definitivo de Kishi Núñez selló el triunfo argentino y aseguró la medalla de bronce.
Proyección hacia el futuro
Este tercer puesto no solo representa una medalla para Argentina, sino que también abre las puertas para su participación en los Juegos Panamericanos de Lima 2027, con la posibilidad de clasificar a los Juegos Olímpicos de Los Ángeles 2028, marcando un hito importante para el desarrollo del fútbol femenino en el país.